El Senado de la República aprobó por mayoría la reforma de «Supremacía Constitucional». El dictamen se respaldó en lo general y particular con 85 votos a favor y 41 en contra, alcanzando así la mayoría calificada necesaria para la reforma constitucional.
Esta medida se implementa como un mecanismo para proteger las reformas constitucionales recientemente aprobadas por la mayoría oficialista en el Congreso, como la elección de jueces, que ha sido suspendida por jueces federales, así como otras propuestas, incluida la eliminación de órganos autónomos, en medio de acusaciones de corrupción y parcialidad contra el Poder Judicial.
El senador Óscar Cantón Zetina, en representación de la Comisión de Puntos Constitucionales, aclaró que el objetivo de la reforma es establecer que no se admitirán acciones de inconstitucionalidad ni controversias constitucionales contra reformas aprobadas por el Congreso, además de evitar que el juicio de amparo se utilice para impugnar estas modificaciones.
La reforma ahora será enviada a la Cámara de Diputados para su análisis y votación.