Ricardo Monreal, coordinador parlamentario de MORENA, dio a conocer los detalles de una nueva reforma constitucional que busca fortalecer la supremacía del constituyente permanente en México. La iniciativa, que se presentará en el Senado, propone modificaciones a los artículos 105, 107 y posiblemente al 103 de la Constitución. Su objetivo es afirmar que no se admite ningún recurso legal, como el amparo o la acción de inconstitucionalidad, contra reformas constitucionales.
Monreal destacó que esta reforma tiene como finalidad garantizar la estabilidad y seguridad jurídica de las enmiendas realizadas por el constituyente, un órgano que requiere una mayoría calificada en ambas cámaras y el respaldo de la mayoría de las legislaturas locales. «La reforma reafirma que no procede recurso alguno contra una adición o reforma constitucional», explicó ante los medios, enfatizando que se trata de una confirmación de lo que ya establece la Constitución.
Además, la propuesta busca elevar a rango constitucional el contenido del artículo 61 de la Ley de Amparo, que actualmente prohíbe el juicio de amparo contra reformas constitucionales. Monreal argumentó que esto dotará de mayor solidez a la norma y evitará interpretaciones que permitan la intervención judicial en las reformas del Congreso.
Al ser cuestionado sobre si esta reforma podría interpretarse como un blindaje para evitar que el Poder Judicial revise decisiones del Legislativo, Monreal negó esta posibilidad, afirmando que no se está reconociendo al Poder Judicial facultades para modificar lo decidido por el órgano reformador. Reiteró que la reforma es simplemente una reafirmación de lo que ya está establecido en la Constitución.
Monreal también aclaró que la reforma no tiene efectos retroactivos, respondiendo a las inquietudes sobre los recursos legales ya interpuestos, y citó jurisprudencia de la Suprema Corte que respalda esta no retroactividad en el contexto de reformas constitucionales.
La tensión aumentó cuando se le preguntó si la actual mayoría calificada del partido en el poder podría cambiar en el futuro. Monreal respondió: «Mientras tengamos la mayoría, la ejerceremos con responsabilidad». Subrayó que la reforma constitucional es un proceso complejo que necesita el apoyo no solo del Congreso, sino también de las legislaturas estatales, lo que la hace legítima y difícil de impugnar.
En respuesta a las críticas que lo comparan con el pasado, cuando el PRI también gobernaba con mayorías, Monreal defendió que la actual coalición representa auténticamente los intereses de la sociedad y que no están legislando de manera arbitraria.