
Los exportadores mexicanos enfrentan un contexto cada vez más complejo debido a diversas dificultades, como un incremento en las revisiones de su mercancía y los tiempos de espera en el trayecto hacia la frontera. Además, se suman las crecientes interrupciones en los sistemas aduaneros, la incertidumbre sobre posibles aranceles por parte de Estados Unidos, y la alta rotación de personal en las empresas.
Jesús Herrera Casso, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior Noreste (Comce), destacó que la incertidumbre actual podría frenar las inversiones durante todo el año, a menos que se llegue a un acuerdo definitivo en las negociaciones comerciales con Estados Unidos sobre los aranceles. Señaló que la falta de claridad sobre el futuro inmediato es muy perjudicial para la economía, tanto en términos del flujo de mercancías como para las estrategias empresariales a largo plazo.
El líder del Comce Noreste expresó que, aunque se espera que las negociaciones y anuncios que se realicen en abril generen algo más de certidumbre, la situación seguirá siendo incierta. De no resolverse este escenario, no solo se detendría el comercio, sino que también afectaría los planes de inversión, que muchas empresas podrían decidir posponer, no solo por un mes, sino potencialmente por todo el año.
A esta situación compleja se añade la falta de personal que enfrentan las empresas, con un déficit de entre el 10% y el 15%. Además, la alta rotación de personal, que llega hasta el 30%, es especialmente pronunciada en la población laboral de entre 20 y 30 años. Esta situación complica aún más la capacidad de las empresas para alcanzar sus metas de producción.
Por otro lado, Andrés Franco Zaldívar, director del Comce Noreste, comentó que la incertidumbre ha provocado dos situaciones que se reflejan en los indicadores de exportaciones e importaciones de enero, las cuales podrían repetirse durante todo el trimestre. En primer lugar, las importaciones de bienes intermedios aumentaron un 10.4% en enero, ya que estos bienes son procesados y en su mayoría destinados al mercado exterior.
Asimismo, las exportaciones manufactureras también registraron un incremento del 8.8% en comparación con el mismo mes del año anterior, lo que constituye un comportamiento inusual para un mes de enero. Este patrón podría ser un indicio de lo que se podría esperar en los próximos meses si persisten las condiciones de incertidumbre.