En el marco del Día Internacional del Policía, Sandra Vanessa López Galván, miembro de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Parral, compartió su emotiva historia sobre lo que la inspiró a elegir la carrera policial.
Al inicio, Sandra Vanessa confiesa que sintió miedo ante los desafíos de la profesión. Sin embargo, con el tiempo, su amor por servir a su comunidad y su vocación se hicieron más fuertes, convirtiéndose en los pilares fundamentales de su labor.
«La vocación y el deseo de servir fueron lo que me impulsaron a ser policía. Mis padres y mi familia han sido mi mayor motivación; su apoyo ha sido crucial para mi desarrollo en un campo que, hasta hace poco, se consideraba solo para hombres», afirmó.
Sandra también destacó que el rol de las mujeres en la policía ha sido un avance significativo. «Hemos demostrado que podemos desempeñar esta labor con el mismo compromiso y dedicación, rompiendo estereotipos y demostrando que también somos capaces de proteger a nuestra comunidad», agregó.
A pesar de los obstáculos y los riesgos que implica la profesión, Sandra Vanessa reconoció que ser policía conlleva sacrificios personales, como pasar días festivos alejados de la familia. Sin embargo, aseguró que la satisfacción de proteger a la sociedad y el compañerismo con sus colegas compensan esos momentos difíciles.
«Nuestro principal objetivo es siempre velar por la seguridad de la ciudad. Aunque enfrentamos situaciones complicadas, seguimos con la misión de apoyar y ayudar a quienes lo necesiten», expresó.
Finalmente, Sandra Vanessa envió un mensaje de reconocimiento a todos sus compañeros de trabajo: «Feliz Día a todos mis colegas. Es esencial reconocer el esfuerzo de esos hombres y mujeres que, durante todo el año, se encargan de cuidar a la sociedad. Estoy agradecida por su dedicación y compromiso».
La historia de Sandra Vanessa López Galván en este Día Internacional del Policía nos recuerda la importancia de valorar y respaldar a quienes dedican su vida a proteger a los demás.