La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que el próximo año enviará una reforma constitucional con el objetivo de impedir que los familiares directos de alcaldes o diputados puedan postularse como candidatos en los periodos inmediatos siguientes. Esta iniciativa forma parte de su compromiso por erradicar el nepotismo en la política mexicana.
Sheinbaum explicó que la reforma busca restaurar el principio de «sufragio efectivo, no reelección», inspirado en la Constitución de 1917, que prohibía la reelección en cualquier cargo de elección popular. Aunque se permitió la reelección para legisladores y presidentes municipales tras una reforma durante la administración del expresidente Felipe Calderón, la presidenta busca limitar este fenómeno para evitar la concentración de poder en manos de familias políticas.
«Si hay alguien que es presidente municipal, no puede dejar a su hermano, hermana, esposo o esposa como candidato en el siguiente periodo», afirmó. La propuesta establece que los familiares directos de funcionarios electos deberán esperar al menos un periodo antes de poder postularse para el mismo cargo.
El objetivo de la reforma es garantizar la ausencia de favoritismos y evitar que el poder se perpetúe en familias, un «vicio» que, según Sheinbaum, ya no es tolerado por el pueblo de México. «Vamos a enviar esta reforma el año que entra para el siguiente periodo de decisiones del Congreso», concluyó, reafirmando su compromiso con la transparencia y la igualdad en los procesos electorales.