Con dos semanas de anticipación, las panaderías de la ciudad han iniciado la producción del tradicional «Pan de Muerto» debido a los pedidos de particulares.
La demanda temprana ha llevado a los panaderos a poner el pan a la venta en sus establecimientos. Sin embargo, destacaron que las ventas no alcanzan los niveles de los días 1 y 2 de noviembre, cuando se celebra el Día de Muertos.
Para hacer el Pan de Muerto más atractivo, los panaderos han innovado en su preparación, agregando rellenos de cajeta, fresa o chocolate. Este cambio busca fomentar su adquisición y ofrecer variedad a los consumidores.
La celebración del Día de Muertos es una tradición importante, y el Pan de Muerto es un elemento clave en esta fecha. Los panaderos están listos para satisfacer la demanda y hacer que esta celebración sea aún más especial.